Las puertas cortafuego pueden ser de madera, vidrio o metal y también se conocen con el nombre de RF, Resistentes al Fuego.
Estas se colocan para impedir la difusión del fuego que puede propiciarse por distintas causas y que representen una amenaza.
Las puertas antiincendios poseen un sistema de compartimiento para acceder a una rápida o vertiginosa evacuación de las infraestructuras en casos de incendios.
La característica primordial de una puerta cortafuego es que su diseño estructural tiene muy en cuenta las holguras para disminuir la dilatación metálica que ocasionan las altas temperaturas.
Al respecto, las puertas cortafuegos gracias a su propiedad de aislamiento general y sistemas térmicos permiten resguardar las vías de escape.
Clasificación de puertas cortafuegos
Las puertas cortafuegos más conocidas son las pivotantes metálicas que han sido probadas para que sus hojas no sobrepasen nunca los 140 grados centígrados de media, así como los 180 grados centígrados en todo punto de la hoja, y en donde el marco no sobrepase los 360 grados.
Por otra parte, las puertas cortafuegos se catalogan por su resistencia al calor, fuego y según ensayos de aislamientos térmico se clasifican en RF, 1 hora, rf,1.5 horas, RF, 2 horas y RF, 3 horas.
Condiciones que deben tener las puertas cortafuegos
Su material aislante interno varía según su grado de resistencia al fuego y sus bisagras deben acceder al abrir de la puerta que debe ser con un mínimo empuje de la mano.
En este sentido, las bisagras son de suma importancia por lo que al estar en mal estado pueden ocasionar fuerzas que se opongan al movimiento, imposibilitando que la puerta no cierre o abra fácilmente en momentos que disparen grandes temperaturas de calor.
Así mismo, al año de su instalación, se debe verificar cada mes que la puerta cierre completamente cuando se deje suelta, y a la vez, la cinta intumescente termoexpandente o expansiva debe seguir pegada al marco.
Otra particularidad se relaciona a la protección eficaz de una puerta cortafuego, que debe estar sujeta a la fuerza operativa de cada componente así como del mantenimiento que se le otorgue.
Mantenimiento de puertas cortafuegos
Estas puertas ameritan un mantenimiento preventivo para que sus propiedades contar incendios se mantengan inalterables.
Las acciones de mantenimiento deben orientarse al estado de la puerta contra deformaciones, golpes, descuelgues y roturas.
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