Condensación en ventanas de aluminio

La condensación en las ventanas y las puertas de aluminio es el fenómeno que se produce cuando la humedad toca una superficie fría, generando gotas de agua e incluso a veces, algo de moho. Desde Tu Ventana de Aluminio.com te damos hoy unas sencillas pautas para evitar que la incómoda y antiestética condensación, se apodere de tus ventanas de aluminio.


La falta de ventilación suele ser el ingrediente principal para que se produzca la condensación. Por esto es importante que ventilemos cada día todos los habitáculos de nuestro hogar u oficina, para conseguir así un ambiente más limpio y más seco.

Para poder evitar la condensación, además de ventilar con regularidad la estancia, deberemos contar con ventanas y puertas que proporcionen un buen aislamiento.

Para conseguir este objetivo, la mejor solución son las ventanas de aluminio, pues aíslan perfectamente de los factores externos, a la vez que aportan una adecuada estética a la habitación en la que están ubicadas.

Con la introducción de una fuente de calor a bajo nivel, conseguiremos asimismo que aumente la temperatura interna, y por lo tanto, evitaremos que se produzca enfriamiento del aire exterior que va cargado de humedad.

En los casos más graves de condensación será preciso acudir a un deshumidificador, que se encargará de restarle humedad al aire.

Para reducir la condensación podemos seguir unos sencillos trucos que nos  serán muy útiles en cualquier situación como, por ejemplo: abrir las ventanas y puertas cuando nos demos una ducha o cocinemos a alta temperatura (si usamos horno, por ejemplo); no secar nunca la ropa húmeda procedente de la lavadora en los radiadores de calefacción; mantener las tapaderas de las sartenes, ollas y cazos cerradas correctamente mientras cocinamos; o separar unos centímetros los muebles de las paredes, para permitir así la circulación de aire entre ambos elementos.

El uso de campanas extractoras; mantener abiertas las ventanas y puertas, así como evitar el uso de calefactores de gas, nos ayudará a controlar la humedad, y por lo tanto el proceso de condensación, de una manera eficaz.